29 de Agosto de este año, día del Abogado, conozco por chat de una página de citas a Adriana Herrero, me cae excelentemente bien. A los poquitos días comenzamos a salir. Vivenciamos en éstos 4 meses una relación muy muy intensa y tremendamente movilizante para ambos. No nos podíamos enamorar. Éramos singles y amigos, compartíamos mucho, entre esas cosas; nuestra búsqueda de otras personas como postulantes de pareja. Vino el tiempo del aquelarre, la cosa era, casi casi loca. Tres amigas, tres postulantes, tres pretendientes y pretendidas, tres mujerones, tres brujas, todas muy blancas, todas muy puras, todas excelentes mujeres para este hombre humilde y muchas veces vulnerable, con fachada de fuerte.
De repente nos vamos acercando al Día D; la noche de anoche. La noche llegó, fue increíble, fue mágica por completo, estaba con una bruja adoradora de la naturaleza y sus elementos, una bruja Wicca. El protagonista era el fuego y como Ariano y experto en pasión, encendí un hermoso fogón y además jugué con ese fuego; le comenté de Adriana y desde la otra punta de Córdoba ésta última me estaba manifestando sin que yo pudiera darme si quiera cuenta, su inmenso poder personal. Ella estaba presente dentro de mi alma en espíritu, fascinándome por completo, a control remoto, a distancia, de manera on line.
No pude concentrarme en la otra, a tal punto que todo se nos fue enfriando y esta mañana no solo ella amaneció fría y crítica, sino también el mismo día, que estaba verdaderamente frío y lluvioso.
Ya no pudimos remontar el momento y aún cuando tenía planeado volverse hoy a la noche a su casa, me pidió que la llevara de regreso antes del almuerzo. Así lo hice e inmediatamente después de despedirme, la llamé a Adriana. Me hablaba del otro lado del teléfono como esa vocecita de adolescente que suelo escucharle cada tanto, cuando esta súper tierna. Dio su último pase mágico y a las 15 hs. le estaba ofreciendo mi compromiso, mi fidelidad, y al fin un noviazgo. Debí lucharlo un poco, hacer mis últimas movidas seductoras, arrojarle mi última telaraña y cuando estaba en medio de ella, metido en sus propias telarañas, cual dos arañas que nos hubiéramos atrapado mutuamente..., de repente escuché un "Si" al otro lado de la línea. Seguí discurseando por teléfono y reiteró: "Si", entonces recién ahí caí al fin!!!. Me había aceptado mi propuesta de pasar al siguiente nivel y a la renovada etapa; noviazgo y pareja cama afuera; ¡La pareja cama afuera vendría a ser con ella y no con mi ex esposa! Cerrándose así este viejo círculo que no pudo cerrarse con Ely.
No pude concentrarme en la otra, a tal punto que todo se nos fue enfriando y esta mañana no solo ella amaneció fría y crítica, sino también el mismo día, que estaba verdaderamente frío y lluvioso.
Ya no pudimos remontar el momento y aún cuando tenía planeado volverse hoy a la noche a su casa, me pidió que la llevara de regreso antes del almuerzo. Así lo hice e inmediatamente después de despedirme, la llamé a Adriana. Me hablaba del otro lado del teléfono como esa vocecita de adolescente que suelo escucharle cada tanto, cuando esta súper tierna. Dio su último pase mágico y a las 15 hs. le estaba ofreciendo mi compromiso, mi fidelidad, y al fin un noviazgo. Debí lucharlo un poco, hacer mis últimas movidas seductoras, arrojarle mi última telaraña y cuando estaba en medio de ella, metido en sus propias telarañas, cual dos arañas que nos hubiéramos atrapado mutuamente..., de repente escuché un "Si" al otro lado de la línea. Seguí discurseando por teléfono y reiteró: "Si", entonces recién ahí caí al fin!!!. Me había aceptado mi propuesta de pasar al siguiente nivel y a la renovada etapa; noviazgo y pareja cama afuera; ¡La pareja cama afuera vendría a ser con ella y no con mi ex esposa! Cerrándose así este viejo círculo que no pudo cerrarse con Ely.
De repente le volvieron las mariposas en la panza, y a mi se me alborotó la cabeza y mis sueños, como cuando fui adolescente y joven y me había enamorado las veces anteriores.
23 de Diciembre de 2017. Para fin de año, creo haber encontrado mi nuevo amor verdadero, la tercera aventura amorosa de mi vida, justo para la época en que el tarot me lo había vaticinado llegaría a mi vida (fin de año, principios del que viene).
Acto seguido de formalizar nuestro amor, llamé a las otras dos brujas y les comenté de mi definición, ambas me felicitaron y se disolvió el aquelarre.
Acto seguido de formalizar nuestro amor, llamé a las otras dos brujas y les comenté de mi definición, ambas me felicitaron y se disolvió el aquelarre.
Si...
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar